Cuánto vale la nacionalidad.

A quien puede interesar especialmente a los legisladores dominicanos.

Autor Ricardo Rojas Vicioso.
Santo Domingo R.D. Esta pregunta parecería descabellada, ya que esto es un concepto abstracto y no puede ser medido, bueno a los que piensa así, les digo que están equivocados.

Bueno por lo menos en parte y le voy a decir porque, durante los debates en el congreso nacional convertida en asamblea Revisora pude observar un espectáculo muy deprimente.

Vi como legisladores de los principales partidos manejaban el asunto de la nacionalidad dominicana, como si fuera un simple debate de un vaso de agua medio lleno, quien o quienes debía beber de esa agua, o a qué hora se deben beber el agua.

Una situación de tanta importancia y que todo el país, así como grupos de todas las tendencias, pro-haitianas y nacionalistas, patriotas esperaban que este será el escenario definitivo que le dará carácter al fenómeno de la haitianización del país.

Un problema que ha provocado hasta enfrentamientos en distintas partes del país, y la República Dominicana, se ha visto sometida al chantaje de grupos y naciones para convertirnos en el muro de contención de las miserias haitianas.

Al tratarse de las señoras y señores senadores y Diputados las autoridades con calidad para eso, sin embargo me dejaron muy decepcionados mis señores diputados y senadores del PLD y PRD para ellos no existe la nacionalidad, existen los acuerdos políticos y nada más.

Para esa gente simple y llanamente su única preocupación es permanecer en el poder sin importar que al país se lo lleve quien lo trajo ¡Ay si el profesor Juan Bosch y Joaquín Balaguer estuvieran vivos! ¿Cómo se hubiesen sentido?, perdón eso no hubiese pasado.

Los acuerdos y el poder están acabando con las ideologías y las fronteras, ahora es más importante para muchos políticos una Jeepeta y esos sueldasos, cosas que 20 años atrás no eran tan importantes, ahora definen cualquier debate, por importante que este sea.

Bueno a veces tenemos que ponernos en el lugar de algunas personas, que tal vez en su vida nunca pensaron que disfrutarían de esos elevados y excesivos salarios que algunos se ganan y otro simplemente lo disfrutan, sin la obligación de hacer las cosas para lo cual fueron designados.

Yo pensaba que cuando un ciudadano toma un Juramento sobre la Santa Biblia es para respectar y hacer respetar las leyes y la constitución y sobre todo lo que tiene que ver con nuestra identidad como nación entre lo que está precisamente la nacionalidad.

En esos debates los sentimientos tan elevados y profundos del nacionalismo brillaron, en los corazones de algunos legisladores, claro para sentir esos sentimientos es como el amor tiene que estar enamorado o y en el caso de la nacionalidad tienen que amar tu país, no de palabras sino de hechos.

Precisamente este escenario fue donde cada quién se quito la marcara, y se mostraron como son realmente, porque la gente con palabras dice muchas cosas aunque no la sienta, pero cuando vamos a los hechos las cosas son muy diferentes.

Por tal razón debo manifestar mi más profunda admiración, reconocimiento y sentimiento de orgullo y Felicitar a los legisladores de la Fuerza Nacional Progresista y algunos del PRSC que me hicieron sentir con sus planteamientos a favor de la nacionalidad y su defensa como dijo el General Matías Ramón Mella cuando lo visitó Juan Pablo Duarte en su lecho casi de muerte ¡aun hay Patria¡ ¡viva la República Dominicana¡

A pesar de que la presidenta de la comisión Isabel Bonilla, que tuvo a su cargo el estudio de las propuestas negó esas presiones, esas propuestas , ni debieron hacerse ya que se decidió por mayoría aplastante, entre los miembros de los partidos oficial y de oposición PRD ahora integrado, al gobierno para estos fines.

Simplemente estos actores pude evidenciar cierta complacencia y cuidado para dejar satisfechos a los organismos internacionales y los grupos pro-haitianos con una fusión del jus san güin y jus Solís. Debó clarificar que los legisladores cobran con los impuestos que pagamos los ciudadanos dominicanos, no con los impuestos pagan los haitianos en su país.

Que dicho sea de paso tiene más suerte que nosotros, por lo menos en lo que a sus legisladores, todos tratan o trabajan para el beneficio de sus nacionales, dentro y fuera de su país, aunque tengan que acabar con la República Dominicana , admiro su nacionalismo el cual en nuestro país está dividido, infiltrado y segmentado por acuerdos. ¡Qué vergüenza!

Debo sin embargo Felicitar reiteradamente a los legisladores, Pelegrin Castillo, José Ricardo Taveras , Ito Bisono, Máximo Castro Silverio que levantaron la llama de la nacionalidad y el patriotismos, reivindicando a nuestro héroes nacionales como Gregorio Luperón que luchó tanto para que disfrutáramos de una independencia y nacionalidad dominicana.

Finalmente estos patriotas legisladores serán premiados por la historia, mientras que los demás quedarán marcados, por el peso de los años, la historia, donde cada generación los aborrecerá y los castigará con el látigo del despreció cuando ya, no puedan disfrutar ni de sus fortuna, Jeepetas, ni propiedades dentro de una caja donde solo existirá sus osamentas.

Mientras sus hijos, nietos y bisnietos trataran en vano de justificar, lo in justificable, de sus acciones, los cuales también serán salpicados por el desprecio y la censura de sus ancestros y que Dios nos proteja de que ninguno de su descendencia, vuelvan a ocupar una curul ,para legislar a favor de naciones que nos esclavizaron, humillaron y mataron a nuestros Héroes nacionales. Ya están advertidos al que le sirva el sombrero que se lo ponga.

Y recuerden que “la Perpetuidad, no puede ser ni por hombres ni por naciones porque solo Dios, es Eterno”. General Omar Torrijos Herrera.

Dios, Patria y Libertad.