¿Es realmente la banda ancha la alternativa que tienen los países de América Latina y el Caribe para expulsar de sus territorios el flagelo de la pobreza y la ignorancia? ¿Servirá efectivamente la banda ancha para impulsar el desarrollo, progreso y la calidad de vida de los habitantes de esta región?
La banda ancha es presentada como la panacea para lograr el desarrollo de estos países. Organismos como el Banco Interamericano de Desarrollo (BID) y países como Corea del Sur han estado promoviendo los Planes Nacionales de Banda Ancha en las naciones de la región.
Ministros, viceministros del sector de telecomunicaciones y líderes empresariales de más de 20 países de las Américas debatieron sobre esta nueva alternativa de crecimiento en el área de las tecnologías de información y la comunicación (TIC), en el II Foro Ministerial de Banda Ancha para el Desarrollo, que se celebró en el hotel Hard Rock de Punta Cana, Higüey.
La actividad, organizada por el BID con el apoyo de la República de Corea del Sur, tuvo al Instituto Dominicano de las Telecomunicaciones (Indotel) como organismo anfitrión.
¿Qué se discutió en este foro? Se debatieron cosas sabidas, pero también otras por saber.
Veamos. El ex ministro de Telecomunicaciones de Colombia y consultor internacional, Diego Molano, enfocó el tema desde la poltrona de la banda ancha para el desarrollo socio-económico. Molano fue seguido por “una serie de mesas redondas y paneles ministeriales sobre el marco público para impulsar el acceso de banda ancha, la adopción y nuevos marcos lógicos legales y el reto de la inversión público/privada para cerrar la brecha digital”.
Igualmente el BID aprovechó para resaltar el trabajo que realiza en la región a través de su plataforma de banda ancha, “tomando acción y apoyando las prioridades de los gobiernos para superar la brecha digital, especialmente en las zonas rurales”.
“El riesgo de quedar rezagados en la adopción de servicios de banda ancha puede afectar los esfuerzos de América Latina y el Caribe en la lucha contra la pobreza y la desigualdad”, apunta el BID. Precisa que “la banda ancha se convierte así en un eje transversal para todos los sectores de desarrollo y un catalizador para la inclusión social, el crecimiento económico y el bienestar social”.
Al respecto, el presidente del BID, Luis Alberto Moreno, dijo en la carta de presentación del Informe “Construyendo puentes, Creando oportunidades: La Banda Ancha como catalizador del desarrollo económico y social en los países de América Latina y el Caribe. La visión de la industria”, que esta herramienta tecnológica se ha revelado como un catalizador de las mejoras en inclusión social mediante la generación de nuevas oportunidades de innovación en educación y salud y a través del reforzamiento de la eciencia y transparencia de los poderes públicos”.
“En este contexto, el Banco Inter-Americano de Desarrollo (BID) va a poner sus mejores esfuerzos en promover la discusión y la colaboración entre todos los agentes del sector público y privado, de los gobiernos y de la industria, con el n de reforzar el potencial de la banda ancha para acelerar el desarrollo de nuestra región”, asentó Moreno.
Y agregó: “Nadie debe tener duda alguna de que el Banco utilizará todas sus capacidades para situar a la región de América Latina y el Caribe al frente de la revolución digital como medio para obtener una mayor productividad, mejorar la competitividad y alcanzar un nivel de vida mejor. Tenemos las mejores expectativas de lo que puede conseguirse a través de las modernas tecnologías de comunicación que están transformando el planeta y ofreciendo tantos beneficios y oportunidades a tanta gente”.
¿Qué es la banda ancha?
Pero, ¿qué es la banda ancha? Según Molano, la banda ancha es internet de alta velocidad, “una herramienta maravillosa para reducir la pobreza y para generarle más oportunidades a la gente”. Para este consultor colombiano, se debe definir una regla de juego que motive al sector privado a realizar las cuantiosas inversiones que se necesitan para desplegar la banda ancha en la región.
Igualmente “el término banda ancha comúnmente se refiere al acceso de alta velocidad a Internet”, de acuerdo a la Broadband for America y la United for an Open Internet.
“Este término –añaden estas instituciones- puede definirse simplemente como la conexión rápida a Internet que siempre está activa” y “permite a un usuario enviar correos electrónicos, navegar en la web, bajar imágenes y música, ver videos, unirse a una conferencia vía web y mucho más”.
Las ventajas de la banda ancha
Según las citadas entidades, el acceso a banda ancha se obtiene a través de diferentes métodos, específicamente la “línea digital del suscriptor (DSL), Módem para cable, fibra, inalámbrica, satélite y banda ancha a través de las líneas eléctricas”.
Destacan que “la inversión privada ha logrado que el sistema de banda ancha esté disponible en el 90 por ciento de la población de los Estados Unidos. “Los proveedores de banda ancha –de esa nación- han invertido más de 120 mil millones de dólares en los últimos años para asegurarse de que los proveedores de contenido, los creadores de aplicaciones y los usuarios de estos servicios tengan las opciones más amplias posibles de las mejores experiencias de Internet posibles”.
Precisan que “el acceso por banda ancha es más rápido que la conexión de acceso telefónico y es diferente por lo siguiente:
- El servicio de banda ancha ofrece velocidad más alta de transmisión de datos – Permite el transporte de más contenido por la “tubería” de transmisión.
- La banda ancha ofrece acceso a los servicios de Internet de más alta calidad – medios de comunicación audiovisual por Internet, VoIP (telefonía por Internet), juegos y servicios interactivos. Muchos de estos servicios, actuales y en desarrollo, requieren la transferencia de grandes cantidades de datos, lo que no es técnicamente factible con el servicio de marcación telefónica. Por lo tanto, el servicio de banda ancha puede ser cada vez más necesario para tener acceso a la amplia gama de servicios y oportunidades que puede ofrecer Internet.
- El sistema de banda ancha siempre está activo – No bloquea las líneas telefónicas y no necesita conectarse de nuevo a la red después de terminar su sesión.
- Menos demora en la transmisión de contenido cuando utiliza el servicio de banda ancha”.
La inversión en América Latina y el Caribe
¿Cuánto se requiere invertir? De acuerdo al presidente del Indotel, Gedeón Santos, quien cita una investigación realizada por la Asociación Hispanoamericana de Centros de Investigación y Empresas de Telecomunicaciones (AHCIET), la región requiere alrededor de 44 mil millones de dólares de inversión en banda ancha como promedio anual para los próximos años.
“El cierre de la brecha digital requiere inversiones muy significativas en los próximos años que se estima en USD 44 mil millones como promedio anual para el período 2011-2020”, puntualizó Santos citando a AHCIET.
En tanto, Luis Marín H., Director Global de Intel Corporation, estima esta inversión entre 300 a 700 billones de dólares y el consultor y ex ministro colombiano de Telecomunicaciones, Diego Molano, sostiene que “efectivamente hay que hacer una inversión muy grande, una inversión sobre todo del sector privado”.
¿Quiénes llevan la delantera?
Algunos países han estado impulsando iniciativas de desarrollo de la banda ancha en sus respectivos territorios y han logrado tomar la delantera en la región. En ese sentido, el Índice de Desarrollo de la Banda Ancha de la plataforma digiLAC que se enmarca dentro del Programa de Banda Ancha del BID destaca que Panamá tomó la delantera, ya que pasó del cuarto al tercer puesto entre 26 países de la región en cuanto al desarrollo del sector.
Igualmente Costa Rica subió cinco posiciones y se colocó en el séptimo lugar, mientras Colombia avanzó una posición y ocupa ahora el quinto lugar. “La brecha entre los países de la Región y las naciones de la Organización para la Cooperación y Desarrollo Económico (OCDE) aumentó en el último año de 1,77 puntos en 2013 a 1,89 puntos en 2014 (4,51 y 6,40, respectivamente, sobre 8 puntos). (La OCDE es una organización intergubernamental que reúne a 34 países comprometidos con las economías de mercado y con sistemas políticos democráticos, que en su conjunto representan el 80% del PIB mundial).
La brecha existente entre los países de América Latina y el Caribe (LAC) y los de la OCDE es de 1,49 puntos en el último año, precisa el informe del BID.
Específicamente, esta brecha se manifiesta en políticas públicas y visión estratégica, regulación y competitividad, infraestructura, aplicaciones y entrenamientos. También, en suscripción mensual de banda ancha fija, visión de las leyes del sector de las Tecnologías de la Información y la Comunicación (TIC), efectividad del fondo de servicio universal, competencia en internet y telefonía, en el servicio de banda ancha fija y banda ancha móvil.
Igualmente, es palpable la citada brecha en materia de infraestructura, en lo que respecta a la población con cobertura móvil, seguridad en el servicio de Internet, hogares con computadora personal, hogares con acceso a Internet, banda ancha fija, banda ancha móvil, líneas de telefonía fija, velocidad de banda ancha fija y velocidad de banda ancha internacional.
En cuanto a aplicaciones y entrenamiento, la brecha de América Latina y el Caribe frente a los países de la OCDE es resaltante, visible, en la adopción de tecnología en las empresas, desarrollo de gobierno electrónico, uso del Internet, internet en las escuelas, fácil acceso a los contenidos digitales, el uso de las redes sociales, videos subidos a You Tube, matriculación en la educación superior y en la educación secundaria.
Los países de la región que muestran un mayor avance aunque sin superar a los de OCDE están Barbados, Chile y Uruguay que muestran índices cercanos a los de naciones como Corea, Luxemburgo, Islandia, Finlandia y Países Bajos.
El Caribe rezagado
Según el BID, el Caribe es la zona que está más rezagada en materia de desarrollo de banda ancha en la región. El más avanzado es el Cono Sur (4,49 puntos) y le siguen los países andinos con 4,41 puntos; América Central 4,38 puntos y el Caribe 3,71 puntos.
La escala de países que ofrece digiLAC del BID establece que Chile encabeza la penetración de banda ancha en la región con 5.57; le siguen Barbados (5.47), Brasil (5.32), Panamá (5.05), Uruguay (4.81), Colombia (4.77), México (4.62), Argentina (4.53), Ecuador (4.34), Jamaica (4.29), Perú (4.26), Costa Rica (4.23) y República Dominicana (4.22).
También, Trinidad y Tobago (4.14), Bahamas (4.04), Venezuela (3.80), Paraguay (3.78), Guatemala (3.71), Nicaragua (3.64), Honduras (3.58), El Salvador (3.52), Guyana (3.16), Bolivia (3.16), Surinam (3.12), Belice (3.11) y Haití, ubicado en el nivel más bajo del Índice de Desarrollo de Banda Ancha (IDBA) con 1.71 puntos.
“A pesar de la existencia de tales diferencias, aún hay razones para el optimismo”, advierte el BID en su citado Informe. Agrega que “La demanda en los países de América Latina y el Caribe de productos y servicios de TIC y banda ancha está creciendo rápidamente, animada por el fuerte crecimiento económico que ha determinado un importante aumento de ingresos en la región”.
“Este aumento de la demanda –apunta el organismo regional-ha atraído la atención tanto de los proveedores de servicios de telecomunicaciones como de los desarrolladores de aplicaciones de banda ancha, que muestran un evidente entusiasmo por el potencial de crecimiento de la región”.
Banda ancha en RD
La República Dominicana se ha propuesto lograr que dentro de cinco años, en el 2020, el 80 por ciento de su población maneje tecnología de banda ancha. Pretende que para entonces los dominicanos estarán conectados e integrados de forma digital a la economía mundial, lo que le hará más inteligente, educados y productivos.
Además, los participantes de un taller sobre banda ancha que organizó el Indotel con el apoyo del BID y el Centro de Estudios de Banda Ancha para el Desarrollo (Ceabad), sugirieron entre los objetivos estratégicos aumentar la cobertura de la fibra óptica al 100% en los municipios y en el 80% de la población, mediante una alianza público privada.
También, que en las escuelas públicas aumenten las habilidades de los profesores de 15 a 50% y de los alumnos de 30 a 80%. “Entre 2016 y 2020, el índice de desarrollo de las comunicaciones debe crecer en cinco puntos, así el país será convertido en una sociedad conectada al futuro para asegurar bienestar, desarrollo socio- económico e inversión social”, precisaron los panelistas.
Para enfrentar estos retos la República Dominicana necesitará una gran cantidad de recursos económicos. Una alternativa que se ha planteado es lograr un financiamiento que se estima en 30 millones de dólares del Banco Mundial para realizar el proyecto Red Nacional de Fibra Óptica que se desarrollaría a través del Indotel. El BID también ha expresado su disposición de financiar iniciativas de banda ancha en la región, incluyendo obviamente a la República Dominicana.
Este financiamiento formaría parte de una iniciativa más amplia que abarca el Caribe y que en principio incluso contempló beneficiar con la interconexión a la vecina nación de Haití.
proyecto de red nacional de fibra optica - resumen ejecutivo.pdf
proyecto de red nacional de fibra optica - resumen ejecutivo.pdf
Aunque se hizo el estudio y el Banco Mundial tiene aprobado los recursos, la iniciativa no ha arrancado a pesar de que las conclusiones técnicas afirman que este proyecto tiene todo el potencial para insertar al país en la vorágine de la economía digital mundial.
“Más que un deseo, cerrar la brecha digital en América Latina (incluyendo a República Dominicana) es hoy en día una necesidad imperiosa”, ha apuntado el presidente del Indotel, Gedeón Santos.
Según el funcionario, “el despliegue de los servicios de banda ancha a nivel nacional tiene que ser afrontado con la misma decisión y ambición que han llevado otros países, que comprometidos con el desarrollo de sus pueblos, desplegaron vastas redes de electricidad, agua y alcantarillado, sistemas de caminos y carreteras, y los demás servicios básicos de infraestructura”.
La cooperación de Korea
Los países de la región han encontrado en la República de Corea un aliado para el despliegue de sus planes nacionales de banda ancha. La cooperación coreana no solo se ha expresado en términos técnicos sino que ha aportado su valiosa experiencia en este aspecto. Corea exhibe por ejemplo un gran avance en materia de las TIC, lo cual le ha provisto de gran desarrollo económico, progreso y superación de la pobreza.
“Como usted ha oído hablar de la experiencia de Corea, el e-Servicios Públicos se ha desarrollado no sólo por la inversión agresiva por parte del gobierno, sino también por superar muchas barreras extendidas sobre diversas áreas, tales como las políticas, estrategias y aspectos institucionales”, expresó Byung-jo Suh, presidente de la Agencia Nacional de la Sociedad de la Información de la República de Corea.
Y agregó:
“Corea está dispuesta a compartir sus experiencias ya sea un éxito, fracaso o dificultad con América Latina y los países del Caribe”.
Una muestra de esa decisión es la creación del Centro de Estudios Avanzados en Banda Ancha para el Desarrollo (Ceabad) que opera desde Nicaragua con financiamiento de la nación asiática a través del Banco Interamericano de Desarrollo (BID), así como el impulso dado a los foros ministeriales para desarrollar banda ancha en América Latina y el Caribe.
Para los coreanos, “un país u organización por sí sola, no pueden desarrollar los futuros necesarios e-Servicios públicos que pueden hacer frente al entorno de las TIC en rápida evolución y demandas de los usuarios cada vez más complejas”.
Entienden que eso “sólo es posible gracias a la colaboración conjunta y esfuerzos entre los países con la participación de todos los actores, incluido el sector público y privado, la industria, la academia y las comunidades de investigación”.
“A este respecto, Corea se ha comprometido con el fortalecimiento de la cooperación de las TIC en todos los países del mundo, incluyendo los países de la América Latina y el Caribe”, enfatizan.
El Seminario que culminará el próximo miércoles, se realiza en el marco del Programa "Educar para Integrar" impulsado por el Ministerio para Políticas de Integración Regional en una alianza estratégica con la Dirección General de Cooperación Multilateral (DIGECOM).
