Autor Ricardo Rojas Vicioso
Santo Domingo R.D. El Jefe de la Policía Nacional, mayor general Rafael Guillermo Guzmán Fermín, reaccionó molesto a la pregunta de si era cierto el rumor de supuesto apresamientos en Puerto Rico de los prófugos Figueroa y Sobeida.
La impresión que deja esta molestia es como si no quisiera que estos prófugos fueran arrestados, a pesar de que hay una persecución con recompensan millonaria y esto es un análisis, por el seguimiento que le vengo dando a estos acontecimientos, no tiene nada que ver con ninguna campaña en su contra.
Tanto Figueroa como Sobeida han dejado a las autoridades policiales, ministerio público y la DNCD en una situación muy difícil, convirtiéndose en el mayor dolor de cabeza para los funcionarios de las instituciones antes mencionadas.
Paradójicamente parecería que estas gente le están sacando la lengua, burlándose literalmente de las autoridades, ya que mientras Figueroa Agosto amenaza vía telefónica, al jefe de la Policía Nacional y de la DNCD, mayores generales Rafael G. Guzmán Fermín y Rolando Rosado Mateo, se pasea tranquilamente de tienda en tienda con Sobeida en Puerto Rico.
Lo extraño del caso es que supuestamente son buscados en Puerto Rico de donde Figueroa escapò de una cárcel de máxima seguridad, luego de ser condenado a 200 años, sin embargo pasa por las mismas narices y a la vista de las autoridades que supuestamente le buscan, “que raro” -¿a quien le creo?
Tanto las autoridades boricuas y dominicanas están quedando en ridículo en esta búsqueda y que parecería que el prófugo tiene más poder de protección, que capacidad logística y de inteligencia de las autoridades que le investigan, cuya debilidad le ha obligado a ofrecer la suma de cinco millones por información que lleve a su captura.
Pero además este caso de Figueroa a puesto en entredicho la seguridad del país, donde un hombre y una mujer, han burlado todos los organismos de seguridad incluyendo los filtros de los aeropuertos del país, por donde supuestamente dicen rumores que salieron ambas personas.
El país necesita de una revisión del personal que maneja la seguridad de las fronteras y puerto y aeropuertos del estado, porque si Agosto como es un supuesto e importante narcotraficante fuera un terroristas ya habría acabado con todo, en el tiempo más que suficiente que llevan detrás de su captura.
Pero lo peor de caso es la impresión que existe en la población de la protección de algunas autoridades, que deja la nación con una gran debilidad en lo que a nuestra Seguridad Nacional se refiere especialmente, si partiéramos del hecho de como dije este hombre hubiese sido un terrorista, ya habría provocado mucho daños en el territorio si se lo hubiese propuesto.
Debemos revisar, sin encubrir a nadie que ha fallado, sin tener que tirarle la pelota de autoridad en autoridad, especialmente la Justicia y la DNCD bajo la custodia donde estuvo Sobeida y una Jueza Patriota y Humanitaria, le otorgo la libertad bajo fianza, que junto a la falta de seguimiento de las instituciones antes mencionadas, le facilitaron la fuga como todo el mundo sabia que pasaría, menos la Jueza.
Las autoridades, no deben molestarse especialmente el Jefe de la Policía que cuando le mencionan el tema de Agosto y Sobeida es como si le mencionaran el mismo Diablo, lo que si se debería es revisar a los equipos de búsqueda uniformada y de inteligencia que si no tiene capacidad, cambiar la logística o buscar otras personas para ver si se mejora y eficiencia el rastreo de ambos prófugos, ante que estos lo encuentren a ellos, y no pase que “los cazadores resulten cazados por sus presas”.
A pesar de los esfuerzo la capacidad y el dinero que de acuerdo a los escándalos de algunos supuestos socios, testaferros, y el dinero incautado deja ver que existe una gran capacidad y poder de acción de este grupo que quien lo encabeza y dirige tiene dinero de sobra, lo que demostró al superar la oferta de búsqueda de él por la del Jefe de la Policía Nacional y Dirección de Control de Drogas (DNCD) de 30 millones por cada uno.
Figueroa y Sobeida se han metido en un bolsillo a las autoridades antes mencionadas, por lo que se debe hacer una revisión dentro de cada una de ellas, para ver si la fiebre está en el enfermo o en la sabana ante que el narcotráfico, la delincuencia y el afán de enriquecimiento, nos acabe de joder a todos y hundir a la Repùblica Dominicana.
Santo Domingo R.D. El Jefe de la Policía Nacional, mayor general Rafael Guillermo Guzmán Fermín, reaccionó molesto a la pregunta de si era cierto el rumor de supuesto apresamientos en Puerto Rico de los prófugos Figueroa y Sobeida.
La impresión que deja esta molestia es como si no quisiera que estos prófugos fueran arrestados, a pesar de que hay una persecución con recompensan millonaria y esto es un análisis, por el seguimiento que le vengo dando a estos acontecimientos, no tiene nada que ver con ninguna campaña en su contra.
Tanto Figueroa como Sobeida han dejado a las autoridades policiales, ministerio público y la DNCD en una situación muy difícil, convirtiéndose en el mayor dolor de cabeza para los funcionarios de las instituciones antes mencionadas.
Paradójicamente parecería que estas gente le están sacando la lengua, burlándose literalmente de las autoridades, ya que mientras Figueroa Agosto amenaza vía telefónica, al jefe de la Policía Nacional y de la DNCD, mayores generales Rafael G. Guzmán Fermín y Rolando Rosado Mateo, se pasea tranquilamente de tienda en tienda con Sobeida en Puerto Rico.
Lo extraño del caso es que supuestamente son buscados en Puerto Rico de donde Figueroa escapò de una cárcel de máxima seguridad, luego de ser condenado a 200 años, sin embargo pasa por las mismas narices y a la vista de las autoridades que supuestamente le buscan, “que raro” -¿a quien le creo?
Tanto las autoridades boricuas y dominicanas están quedando en ridículo en esta búsqueda y que parecería que el prófugo tiene más poder de protección, que capacidad logística y de inteligencia de las autoridades que le investigan, cuya debilidad le ha obligado a ofrecer la suma de cinco millones por información que lleve a su captura.
Pero además este caso de Figueroa a puesto en entredicho la seguridad del país, donde un hombre y una mujer, han burlado todos los organismos de seguridad incluyendo los filtros de los aeropuertos del país, por donde supuestamente dicen rumores que salieron ambas personas.
El país necesita de una revisión del personal que maneja la seguridad de las fronteras y puerto y aeropuertos del estado, porque si Agosto como es un supuesto e importante narcotraficante fuera un terroristas ya habría acabado con todo, en el tiempo más que suficiente que llevan detrás de su captura.
Pero lo peor de caso es la impresión que existe en la población de la protección de algunas autoridades, que deja la nación con una gran debilidad en lo que a nuestra Seguridad Nacional se refiere especialmente, si partiéramos del hecho de como dije este hombre hubiese sido un terrorista, ya habría provocado mucho daños en el territorio si se lo hubiese propuesto.
Debemos revisar, sin encubrir a nadie que ha fallado, sin tener que tirarle la pelota de autoridad en autoridad, especialmente la Justicia y la DNCD bajo la custodia donde estuvo Sobeida y una Jueza Patriota y Humanitaria, le otorgo la libertad bajo fianza, que junto a la falta de seguimiento de las instituciones antes mencionadas, le facilitaron la fuga como todo el mundo sabia que pasaría, menos la Jueza.
Las autoridades, no deben molestarse especialmente el Jefe de la Policía que cuando le mencionan el tema de Agosto y Sobeida es como si le mencionaran el mismo Diablo, lo que si se debería es revisar a los equipos de búsqueda uniformada y de inteligencia que si no tiene capacidad, cambiar la logística o buscar otras personas para ver si se mejora y eficiencia el rastreo de ambos prófugos, ante que estos lo encuentren a ellos, y no pase que “los cazadores resulten cazados por sus presas”.
A pesar de los esfuerzo la capacidad y el dinero que de acuerdo a los escándalos de algunos supuestos socios, testaferros, y el dinero incautado deja ver que existe una gran capacidad y poder de acción de este grupo que quien lo encabeza y dirige tiene dinero de sobra, lo que demostró al superar la oferta de búsqueda de él por la del Jefe de la Policía Nacional y Dirección de Control de Drogas (DNCD) de 30 millones por cada uno.
Figueroa y Sobeida se han metido en un bolsillo a las autoridades antes mencionadas, por lo que se debe hacer una revisión dentro de cada una de ellas, para ver si la fiebre está en el enfermo o en la sabana ante que el narcotráfico, la delincuencia y el afán de enriquecimiento, nos acabe de joder a todos y hundir a la Repùblica Dominicana.
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