Autor Ricardo Rojas Vicioso.
Santo Domingo R.D. La muerte del reconocido narcotraficante, Florián Feliz en la cárcel modelo de Najayo puso al descubierto una serie de privilegios de los que disfrutaba, lujos y concesiones muchas de las cuales el director de prisión, dijo a los medios de comunicación, que no conocía, pero este acontecimiento dejò una señal clara de la peligrosa y corrupta debilidad con que opera el sistema carcelario en el país, por que los privilegios no, son gratis.
Delincuentes involucrados en hechos de sangre que se suponía deberían, estar en prisión pagando los delitos cometidos y como por arte de magia, salen de las cárceles, y no precisamente a realizar labores humanitarias, sino criminales, como los que asesinaron al Senador Darío Gómez.
Todo esto pasa por la debilidad del sistema carcelario, que por un lado quiere tratar a los reclusos con muchos privilegios, y el otro es que todo el que tiene dinero se les facilitan las cosas, aunque las cárceles, no deben ser lugares de torturas los que están allí, es por que algún delito han cometido y el sistema tiene que hacerle entender que deben pagar por sus hechos en perjuicio de la sociedad, mientras más débil es el sistema más se fortalece y se organiza el crimen.
El nuevo modelo quiere crear hoteles para los reclusos, copiando modelos de países modernos, pero no entiende que muchas de estas personas, nacieron, crecieron y tienen una mentalidad delictiva, están en buscar dinero fácil a como de lugar, si quieren un celular o un carro simplemente, te dan, un tiro te matan, y te lo quitan, eso es todo para ellos.
No existe remordimiento, ni piedad son demonios, que sin importar quien caiga, buscan lo que quieren, burlándose y aprovechándose del sistema, de sus debilidades, así como de la sensibilidad humana de sus funcionarios que creen que están trabajando con ciudadanos modelos y no con delincuentes profesionales y sobre todo que le gusta esa buena vida. Aunque debo aclarar que no son todos.
Pero para que tenga una idea de la gravedad del desarrollo delictivo, enraizado en la mentalidad de estos delincuentes es la frecuente participación, de menores en la ocurrencia de crímenes, robos y atracos actividad donde se inician desde muy jóvenes, por lo que cuando llegan a adultos, si es que antes, no son asesinado por otros malhechores o en un enfrentamientos con la policía, los que llegan a la madures, son profesionales, delincuentes con una gran cantidad de delitos que solo Dios y ellos saben.
Lamentablemente el sistema solo puede detectar una ínfima parte, yo creo que solo un uno por ciento del total de atracos, asesinatos y violaciones de esos individuos, es detectado por el sistema, el resto queda en el anonimato para desgracia de la victimas y la propia sociedad.
Estamos entrando en un siglo donde por lo que observamos el crimen terminará adueñándose de las calles, y los ciudadanos como en el presente, ya no podremos transitar, con seguridad, sin que seamos victimas de atraco, ya que se han convertido en el centro de operaciones de sus dueños, los señores criminales.
Y lo mas peligros es que tiene un apoyo en un Código Procesal Penal, y del menor con excelentes garantías y debilidades que los favorecen, así como los militares y policías incluyendo de altos rangos ambiciosos y corruptos que como auxiliares de la justicia y las leyes que deben perseguirlos muchos terminan a su lado, debilitando la lucha contra el crimen y aumentando las operaciones delictiva en todo el país.
Los ajusticiamientos en las calles de ladrones que estremecen y avergüenzan a las autoridades de justicia porque precisamente, son lo que dan a conocer al mundo el resultado de todas las debilidades, antes expuestas que regularmente el mismo sistema trata de ocultar o minimizar, pero que todo la sociedad sufre en carne propia, incluyendo militares y los propios policías, menos los funcionario, jueces, fiscales que disfrutan de una seguridad las 24 horas del día.
Santo Domingo R.D. La muerte del reconocido narcotraficante, Florián Feliz en la cárcel modelo de Najayo puso al descubierto una serie de privilegios de los que disfrutaba, lujos y concesiones muchas de las cuales el director de prisión, dijo a los medios de comunicación, que no conocía, pero este acontecimiento dejò una señal clara de la peligrosa y corrupta debilidad con que opera el sistema carcelario en el país, por que los privilegios no, son gratis.
Delincuentes involucrados en hechos de sangre que se suponía deberían, estar en prisión pagando los delitos cometidos y como por arte de magia, salen de las cárceles, y no precisamente a realizar labores humanitarias, sino criminales, como los que asesinaron al Senador Darío Gómez.
Todo esto pasa por la debilidad del sistema carcelario, que por un lado quiere tratar a los reclusos con muchos privilegios, y el otro es que todo el que tiene dinero se les facilitan las cosas, aunque las cárceles, no deben ser lugares de torturas los que están allí, es por que algún delito han cometido y el sistema tiene que hacerle entender que deben pagar por sus hechos en perjuicio de la sociedad, mientras más débil es el sistema más se fortalece y se organiza el crimen.
El nuevo modelo quiere crear hoteles para los reclusos, copiando modelos de países modernos, pero no entiende que muchas de estas personas, nacieron, crecieron y tienen una mentalidad delictiva, están en buscar dinero fácil a como de lugar, si quieren un celular o un carro simplemente, te dan, un tiro te matan, y te lo quitan, eso es todo para ellos.
No existe remordimiento, ni piedad son demonios, que sin importar quien caiga, buscan lo que quieren, burlándose y aprovechándose del sistema, de sus debilidades, así como de la sensibilidad humana de sus funcionarios que creen que están trabajando con ciudadanos modelos y no con delincuentes profesionales y sobre todo que le gusta esa buena vida. Aunque debo aclarar que no son todos.
Pero para que tenga una idea de la gravedad del desarrollo delictivo, enraizado en la mentalidad de estos delincuentes es la frecuente participación, de menores en la ocurrencia de crímenes, robos y atracos actividad donde se inician desde muy jóvenes, por lo que cuando llegan a adultos, si es que antes, no son asesinado por otros malhechores o en un enfrentamientos con la policía, los que llegan a la madures, son profesionales, delincuentes con una gran cantidad de delitos que solo Dios y ellos saben.
Lamentablemente el sistema solo puede detectar una ínfima parte, yo creo que solo un uno por ciento del total de atracos, asesinatos y violaciones de esos individuos, es detectado por el sistema, el resto queda en el anonimato para desgracia de la victimas y la propia sociedad.
Estamos entrando en un siglo donde por lo que observamos el crimen terminará adueñándose de las calles, y los ciudadanos como en el presente, ya no podremos transitar, con seguridad, sin que seamos victimas de atraco, ya que se han convertido en el centro de operaciones de sus dueños, los señores criminales.
Y lo mas peligros es que tiene un apoyo en un Código Procesal Penal, y del menor con excelentes garantías y debilidades que los favorecen, así como los militares y policías incluyendo de altos rangos ambiciosos y corruptos que como auxiliares de la justicia y las leyes que deben perseguirlos muchos terminan a su lado, debilitando la lucha contra el crimen y aumentando las operaciones delictiva en todo el país.
Los ajusticiamientos en las calles de ladrones que estremecen y avergüenzan a las autoridades de justicia porque precisamente, son lo que dan a conocer al mundo el resultado de todas las debilidades, antes expuestas que regularmente el mismo sistema trata de ocultar o minimizar, pero que todo la sociedad sufre en carne propia, incluyendo militares y los propios policías, menos los funcionario, jueces, fiscales que disfrutan de una seguridad las 24 horas del día.
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