Inmigrantes haitianos estan por todas partes
del territorio de la R.D
del territorio de la R.D
Por Ricardo Rojas Vicioso.
Santo Domingo. R.D La República Dominicana, ha sido desacreditada en casi todo el mundo, como una nación, que maltrata a los inmigrantes haitianos en su territorio, lo que ha causado que muchos pueblos sientan una gran impotencia, indignación y malestar por esa situación.
Acontecimientos esporádico son manejado y masificados de forma maliciosa por grupo e individuos, que no son pro haitianos, como quieren venderse, mas bien son verdaderos, enemigos, de estos dos pueblos, porque están permanentemente instigando a la beligerancia, y en contra de la convivencia pacífica de dominicanos y haitianos.
Y es que mucha gente no sabe que eso es un buen negocio y además les da una gran proyección a los grupos o individuos, en los medios de comunicaciones, nacionales e internacionales, porque con esta situación, entre dominicanos y haitianos se ha creado una especie de morbo, razón por lo cual siempre ha sido y será noticia la posibilidad de una gran beligerancia.
Pero ¿cuál es la realidad de esos maltratos? ¿Realmente estas cosas pasan como se denuncian? , pues no, a pesar de que el país tiene una población de más de 1.5 millones de nacionales haitianos, con costumbre diferentes, los problemas que se presentan, son tan comunes como los de cualquier grupo étnico.
Los haitianos, aun cuando tiene hábitos y proceder diferente a los de los criollos, nadie se mete con ellos, porque en la República Dominicana contrario a la imagen de maltrato que quieran vender internacionalmente, es una tierra que alberga a cualquier extranjero, siempre y cuando no atente con la moral y las buenas costumbres de los dominicanos.
Para que el mundo tenga bien claro, los haitianos han ido cambiando, los duros trabajos de los bateyes, para integrarse a la vida productiva común de los dominicanos, en los principales centros productivos nacionales, donde se pueden ver desarrollando labores muy normales. Lo que esos grupos e individuos, no dicen ni tampoco les interesa que el mundo conozca.
Los inmigrantes han ido modernizando y mejorando su labor productiva, soltando los machetes de los campos de caña, y los han cambiado, por la venta de agua de coco, helados, tarjetas para celulares, vigilantes privados, la construcción, en granjas, el choncho, taxiando, motochoncho, trabajos de en oficinas, propietarios de tiendas y centros de informática, inclusive me han informado que hasta han podido ingresar en las Fuerzas Armadas entre otras trabajos.
Estos son espacios de trabajo comunes para los dominicanos y haitianos con la diferencia de que la realidad, es que los segundo cada día ocupan más puestos de trabajos a los criollos.
Pero además al tiempo que han ido paulatinamente ampliando su terreno laboral, hay un punto y es que esta mano de obra es pagada por debajo de los que se le costean a los dominicanos y ahí, es donde nace la defensa de algunos sectores empresariales y de poder que le dan apoyo a esos grupos que luchan por unos supuestos derechos de los inmigrantes haitianos.
La situación radica en el hecho de que para muchos empresarios que solo piensan en multiplicar sus beneficios, les resulta mejor contratar a los inmigrantes, que no tiene conocimientos de las leyes laborales, por lo que son menos exigentes.
Debo puntualizar que nuestros comentarios no están, dirigido a que estemos contrarios a que se emplee, esa mano de obra, sino que se haga dentro del marco legal, y respetando a los obreros dominicanos que tienen también bastantes necesidades para llevarles dinero a sus familias, para su sostenimiento.
Realmente, creo que el único maltrato que ellos reciben es pagarle a veces un salario un poco menor, con relación al de los dominicanos, en este caso, los responsables son los empleadores, a los cuales se deberían de castigar por no cumplir con las leyes laborales, y de esta forma se verán en la obligación de pagar los justo y terminaría con esa leve explotación obrera, que además es común en otros inmigrantes en el mundo incluyendo los mismo dominicanos.
Los problemas de la nación haitiana no se va a resolver con desacreditar a su estado y vecino más cercano y que además, el que mayores beneficios ofrece al desarrollo de los inmigrantes haitianos, dentro y fuera del territorio haitiano; sino que las potencias mundiales se pongan de acuerdo, para llegar a la raíces de los problemas de este pobre y atrasado pueblo, en vez de querer tirarle esa enorme carga a la República Dominicana.
Deben revisar la historia y verán quien o quienes son los verdaderos culpables de la desgracia de esta nación, si se puede llamar asi.
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