El Leño Pinto Digital
Cápsula naval
Por Homero L. Lajara Solá
Que el miedo se disipe como la niebla al amanecer, permitiendo que nuestras instituciones dejen de depender del viento incierto y avancen con rumbo firme y propio, superando las aguas estancadas del mar de los Sargazos.
La disciplina no es inmovilidad, ni la obediencia ceguera. El verdadero liderazgo reside en actuar con determinación dentro del deber, en ser faro y no ancla.
Que la institucionalidad navegue con la propulsión de las velas de la justicia, sin olvidar nunca—y sin que sea negociable—el respeto y la subordinación al poder civil.
Que el pensamiento, motivado por la capacitación, la educación y el entrenamiento, refuerce cada día el casco de las instituciones que tienen por misión constitucional preservar la integridad territorial y la salud de la República.
La disciplina es el timón, la preparación es el rumbo y el deber es el puerto seguro. Porque las aguas inciertas no deben detener al buen navegante, sino afinar su pericia para gobernar con firmeza su embarcación.⚓
No hay comentarios.:
Publicar un comentario