AMET y su lucha contra conductores imprudentes.

Por Ricardo Rojas Vicioso.

Cada día salimos a las calles de Santo Domingo, y vemos el  mismo espectáculo de una gran cantidad de conductores imprudentes, que en sus violaciones de normas de tránsitos crean un caos a todas horas del día y la noche.

La Autoridad Metropolitana del Transporte por sus siglas AMET, con sus agentes diseminados en puntos estratégicos de las principales avenidas, hacen un gran esfuerzo para tratar de viabilizar  el transito.

Pero a pesar de los esfuerzos, muchos conductores siguen tratando de pasarse  con el semáforo en rojo de Parar, entrar por calles de una vía, o muchos más fuertes, tratan de avanzar en el carril contrario.

El accidente de la foto del camión, fue causado por un motorista, el cual fue asistido por el servicio 911 pero eso es muy común, ya que los motoristas, conducen sin ninguna precaución, y hay momentos en que la suerte no está de su parte. 

Salir a las calles hay que tener mucha paciencia, ya que además de irrespetar las leyes de tránsito, muchos conductores con sus malas acciones, también irrespetan los derechos de transito de otros conductores.

Pero de lo que se trata es que las leyes de tránsito deben ser respetadas, por todos y todas, los conductores malos, deben ser castigados de forma ejemplar.

En la República Dominicana en los últimos 30 años , no solo se ha incrementado la cantidad de vehículos, motocicletas, y todo tipo de transporte, además con ese aumento han ingresado muchos conductores irrespetuoso, y personas con muy poca capacidad para conducir, que quizás por obra de Dios no provocan, un accidente cada vez que usan un volante.

Antes cuando uno salía a las calles tenía que ser muy cuidadoso, ya que cualquier manejo anormal, llamaba la atención de un policía de tránsito, y automáticamente este nos detenía.

Pero ahora eso es algo normal, tanto que los mismos miembros de la AMET, ni caso le hacen, a menos que estén en algún operativo específico y el conductor incurra en el delito que se persigue en ese momento.

Pero en estos tiempos tan modernos, la gente está tomando un vehículo, y sale a las calles como si estuviera solo en ellas, especialmente los motoristas, guagüero, y camioneros, ellos se creen los dueños de las calles.

Regularmente salgo y además de conducir examino el comportamiento de muchos de los conductores, que pienso que deberían estar visitando un psicólogo, o psiquiatra, ya que con su conducta evidencia tener serios problemas.

Pero esta situación no se toma en cuenta, ya que nos hemos ido acostumbrando al desorden, y lo anormal es lo común, si como conductor intentas mantener la distancia correspondiente de acuerdo a la velocidad, como se estipula en la ley de transito, del vehículo que llevas delante, viene uno y se mete delante de ti.

Yo particularmente cuando salgo busco vías alternativas, que me saquen de las principales calles, o avenidas y de esta forma trato de avanzar con mayor seguridad y tranquilidad.

Los esfuerzos de la AMET, para tratar de que en las horas picos, se hagan menos tapones, los ha llevado hasta a poner conos, con lo que se evita que conductores se crucen de un carril a otro en la entrada de puentes y elevados, ya que no les gusta ocupar su lugar detrás, y quieren ser más vivos avanzando y luego entrando a la fuerza al otro carril.

Pero más que conos y una gran cantidad de agentes en las calles, se debe imponer el respeto de la ley, los conductores deben ser castigados de forma ejemplar, y si es posible suspenderle su licencia a los que la tienen, y los que conduzcan sin licencia también multarlo de forma ejemplar.

Los conductores sencillamente no quieren ni respetar a los AMET, ni la ley, ni los demás conductores, a los cuales le tiran los vehículos encima, obligándolos a ceder un espacios delante y evitar que los choquen de forma obligada y abusiva.

El manejo temerario aquí se ha convertido en un deporte, ya que nadie persigue un conductor por un manejo temerario, prefieren multar uno detenido por el cinturón, o un motorista por no tener el casco protector, que no deja de ser importante, pero el manejo temerario a diferencias de los antes mencionados, pone la vida en peligro de segundos y terceros, y no solo del conductor temerario.

Creo que el director de la AMET como todos los que les han antecedido están preocupados por mejorar el transito en las calles, pero tiene que crear una unidad especial, con oficiales superiores, para detectar, grabar, capturar y multar conductores imprudentes en unidades que no estén identificadas con logos, ya que los conductores cuando ven un miembro o un vehículo de la AMET, tiene un comportamiento diferentes.

Las calles y avenidas seguirán recibiendo vehículos, y debemos iniciar un adecentamiento del tránsito, llevando a los conductores el respeto y cumplimiento de las leyes y normativas de transito que fueron creadas, para precisamente ayudar a que los conductores se movilicen, con seguridad y rapidez a sus lugares de destinos en todo el país.

Un punto que no podía dejar son las acciones de exceso de fuerza, y abuso de poder de algunos miembros, de la AMET, con civiles y militares, que le hace mucho daño, a esa institución, civiles y miembros deben respetarse, pero la autoridad que no respeta, no la respetan, deben manejarse con profesionalidad, y evitar la pasión, para eso existen los entrenamientos, y capacitación, el que no esté preparado mentalmente para trabajar con gente, que busque otra cosa, ya que en la aplicación  de las normas de transito a los ciudadanos deben ser tratados con respeto, sobre todo, ya que no se trata de criminales, si no de conductores, y la función de la autoridad está especificada igual que su rol.

Finalizo con esta frase que con su aplicación ayudaremos mucho al tránsito en nuestro país. “el respeto al derecho ajeno, es la paz” Benito Juárez.