Por Ricardo Rojas Vicioso.
Por segunda vez
la población se queda esperando los posibles cambios, ascensos y pensiones que
se viene hablando desde hace más de ocho meses.

A pesar de las
actividades propias del 16 de agosto la población espera como era costumbre,
movimientos importantes de algunos funcionarios, especialmente aquellos, donde
su desenvolvimiento, no ha llenado las expectativas o se han calentado por la comisión
de errores en su ejecutoria.
Ya inclusive en
algunos programas de radio y televisión se mencionaban, nombres de funcionarios
que podían, ser destituidos y los que podrían ser premiados con nombramientos en el nuevo tren gubernamental.
Mientras que en
las Fuerzas Armadas y la Policía Nacional, se encuentran esperando por los ascensos una
gran cantidad de alistados y oficiales con el tiempo requerido para los mismos.
Además una
cantidad de generales, que se encuentran sin funciones no saben cual será su destino,
por lo que esto le genera una gran incertidumbre tanto a ellos como a sus
familias, amigos y allegados.
Entre
las razones, por las cual no se han
ejecutado los movimientos, piensan que
se está en la espera de la aprobación de la Nueva Ley Orgánica de las Fuerzas
Armadas, y también la de la Policía Nacional.
La primera fue
observada por el presidente en más de 40 artículos y devuelta a la Cámara del
Diputado, y la segunda no se ha tenido noticias.
Mientras tanto en
los destacamentos y recintos militares desde antes del 16 de agosto los motivos
de conversaciones giran entorno a los posibles ascensos y cambios. Y que esos cambios podrían afectar, tanto funcionarios civiles como los militares y
policiales.
Desde el pasado
27 de febrero numerosos militares y policías se mantienen en la espera de los ascensos que debieron haberse realizado en esa
época por lo que se pensó que este 16 de agosto seria inminentes.
La dilación de
los esperados ascensos, ha generado nerviosismos entre militares y policías, ya
que sencillamente, una gran parte de
ellos, tiene sus requisitos completados y hasta sus rangos comprados.
Además El ministro
de las Fuerzas Armadas, Almirante Sigfrido A. Pared Pérez había dicho en varias
entrevista a los medios de prensa , que esos ascensos, ya estaban revisados y
que todo estaba listo para realizar los mismos, por lo que ni la población ni
tampoco los militares y policías entiende la razón por lo que no se han hecho.
Finalmente si
esos cambios, ascensos o retiro no se realizan la semana próxima, posiblemente no se realizarán ya en este año,
por lo que se deberá esperar el próximo 27
de febrero.
Pero la pregunta
que nos hacemos, gira entorno a dos razonamientos diferentes, el primero: si el
señor presidente con no hacer cambios, ni
ascensos o retiro está implementando una nueva forma de gobernar y
rompiendo con los esquemas, pasados o en segundo lugar si no se han hecho los
mismos por algún otro tipo de razones, que nada tiene que ver con la primera.
Mientras que para
los generales que se encuentran, sin funciones, la espera y la falta de
informaciones en ese sentido, los mantiene en una especie de limbo lo que además, les genera una gran incertidumbre
tanto a ellos como a sus familias.
Pero no puede
hacer otra cosas que seguir esperando lo
que su comandante, el Presidente Danilo Medina decidirá con su destino.
Algunos de los
generales sin funciones, que tiene negocios particulares, han decidido
dedicarse atenderlos, pero aunque les resulta una importante terapia ocupacional,
no les resuelve sus problemas, ya que siguen siendo generales de las República,
hasta tanto un decreto los pongan en retiro o los nombre en una nueva función que
dicho sea de paso, para muchos esperan la ultima y no la primera.
Pero la verdad
es que para esos miembros de las Fuerzas Armadas, y la Policía Nacional, los
ascensos tienen un significado e importancia vital en sus carreras, y generan satisfacción,
no solo para los que lo reciben, también los familiares y amigos comparten su alegría.
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