Dos personas asesinadas y una herida de mano de policías por no detenerse en lugares oscuros e inseguros.
Por Ricardo Rojas Vicioso.
Santo Domingo R.D. Las acciones donde han sido asesinados dos personas y causado heridas aun tercero en una pierna por miembros de la policía, coloca a la ciudadanía en una situación de terrorismo policíaco.
Por tal razón, ahora además de cuidarse de los delincuentes, la institución creada para protegerlo representa un peligro para los ciudadanos que han manifestado su desconfianza y que se resisten a pararse en lugares oscuros por el temor de ser atracado por ellos.
Pero además sale a relucir un comportamiento desordenado, indisciplinado, incapaz por encima de las leyes y la misma constitución y fuera de control
Además sobre todo muy sospechoso de los miembros de la policía que ubican su lugar de chequeos con las mismas características, de los lugares utilizadas por los delincuentes, oscuros para esconder su identidad y así evitar ser reconocidos para comete atracos.
Uno de estos casos sospechosos y con similares características de los anteriores ocurrió en la Autopista de nordeste este viernes donde cayó abatido el señor Geraldo Reyes Severino de 81 años de edad, luego de recibir varios disparos por la policía, la camioneta que conducía su hijo.
Una patrulla con su modalidad de mandar a para en lugares oscuros quien sabe con que propósitos, cuando, no se detuvieron en el lugar donde ellos querían, le entraron a tiros, cayendo abatido el señor Geraldo.
Los familiares testigos del hecho ofrecieron su declaración, al fiscal de la provincia de Monte Plata mientras que los policías por instrucciones del jefe de la investigación de la uniformada, se negaron hablar diciendo que no tiene nada que decir que ellos andaban trabajando por lo que este hecho de sangre que se suma a los anteriores han sumido al país en un “Estado de terror policíaco”.
El hijo de señor Geraldo narra que los policías le ordenaron parar en un lugar oscuro y él siguió para hacerlo en uno más claro, temiendo que se tratara de atracadores, por lo que de inmediato le dispararon a las gomas y luego al vehiculo, donde resultó alcanzado mortalmente el padre del conductor.
El Fiscal de Monte Plata solicitud medidas de coerción y dejo arrestado a los cinco policías que intervinieron en el asesinato, sólo esperamos que otro juez no los deje en libertad, como en el caso del estudiante de derecho.
La puesta en libertad de uno de los implicados del joven estudiante de derecho asesinado, ha llenado de indignación a los familiares, situación que califican de insensible y que no ayuda al combatir la ola de crímenes y delitos que se están cometiendo en el país.
Pero volviendo al caso de Monte Plata la patrulla estaba comandada por el mayor Estrella Fernández y la integraban un segundo teniente y tres sargentos.
Además de este hecho la suma de los que le antecedieron el asesinato del estudiante de termino de derecho en iguales condiciones y un joven en el Cibao al cual le dispararon con una escopeta y le dañaron una pierna por lo que no podrá caminar, han aumentado la desconfianza en la Policía Nacional.
Estos hechos han llenado de indignación al pueblo dominicano y obligado a que el presidente de la República doctor Leonel Fernández Reyna y el jefe de la Policía Nacional junto a otros sectores se pronunciaran en contra y deploraran dichas acciones aunque no han dado resultado ya que los agentes al parecer se manejan sin control, ni subordinación como chivos sin ley.
Pero más que lamentaciones debemos señalar que estos actuaciones policiales, que han sido difundida por los medios de comunicación ponen en evidencia el deterioro de la disciplina, preparación y el trabajo que la uniformada está haciendo, lo que nos da una muestra por que la delincuencia avanza indetenible en el país, ya que en vez de enfrentar la delincuencia matan a las personas que deberían proteger.
Estos hechos no deben quedar arropado por el manto de la impunidad y el olvido ya que si no se castiga de forma ejemplarizadora estos malos policías, otros seguirán su mal ejemplo por lo que los jueces, fiscales y las autoridades que tenga que ver en estos asunto, tiene que hacer su mayor esfuerzo para tranquilidad de la familia dominicana y estos no vuelva a ocurrir.
Y al capaz mayor general Rafael Guillermo Guzmán Fermín, jefe de todos los policías, del país, que depure bien quienes se encuentran usando indignamente ese uniformes y las armas que el pueblo paga con sus impuesto que son para protegerlos, no para maltratarlos, ni asesinar ciudadanos indefensos y productivos de esta patria.
Por Ricardo Rojas Vicioso.
Santo Domingo R.D. Las acciones donde han sido asesinados dos personas y causado heridas aun tercero en una pierna por miembros de la policía, coloca a la ciudadanía en una situación de terrorismo policíaco.
Por tal razón, ahora además de cuidarse de los delincuentes, la institución creada para protegerlo representa un peligro para los ciudadanos que han manifestado su desconfianza y que se resisten a pararse en lugares oscuros por el temor de ser atracado por ellos.
Pero además sale a relucir un comportamiento desordenado, indisciplinado, incapaz por encima de las leyes y la misma constitución y fuera de control
Además sobre todo muy sospechoso de los miembros de la policía que ubican su lugar de chequeos con las mismas características, de los lugares utilizadas por los delincuentes, oscuros para esconder su identidad y así evitar ser reconocidos para comete atracos.
Uno de estos casos sospechosos y con similares características de los anteriores ocurrió en la Autopista de nordeste este viernes donde cayó abatido el señor Geraldo Reyes Severino de 81 años de edad, luego de recibir varios disparos por la policía, la camioneta que conducía su hijo.
Una patrulla con su modalidad de mandar a para en lugares oscuros quien sabe con que propósitos, cuando, no se detuvieron en el lugar donde ellos querían, le entraron a tiros, cayendo abatido el señor Geraldo.
Los familiares testigos del hecho ofrecieron su declaración, al fiscal de la provincia de Monte Plata mientras que los policías por instrucciones del jefe de la investigación de la uniformada, se negaron hablar diciendo que no tiene nada que decir que ellos andaban trabajando por lo que este hecho de sangre que se suma a los anteriores han sumido al país en un “Estado de terror policíaco”.
El hijo de señor Geraldo narra que los policías le ordenaron parar en un lugar oscuro y él siguió para hacerlo en uno más claro, temiendo que se tratara de atracadores, por lo que de inmediato le dispararon a las gomas y luego al vehiculo, donde resultó alcanzado mortalmente el padre del conductor.
El Fiscal de Monte Plata solicitud medidas de coerción y dejo arrestado a los cinco policías que intervinieron en el asesinato, sólo esperamos que otro juez no los deje en libertad, como en el caso del estudiante de derecho.
La puesta en libertad de uno de los implicados del joven estudiante de derecho asesinado, ha llenado de indignación a los familiares, situación que califican de insensible y que no ayuda al combatir la ola de crímenes y delitos que se están cometiendo en el país.
Pero volviendo al caso de Monte Plata la patrulla estaba comandada por el mayor Estrella Fernández y la integraban un segundo teniente y tres sargentos.
Además de este hecho la suma de los que le antecedieron el asesinato del estudiante de termino de derecho en iguales condiciones y un joven en el Cibao al cual le dispararon con una escopeta y le dañaron una pierna por lo que no podrá caminar, han aumentado la desconfianza en la Policía Nacional.
Estos hechos han llenado de indignación al pueblo dominicano y obligado a que el presidente de la República doctor Leonel Fernández Reyna y el jefe de la Policía Nacional junto a otros sectores se pronunciaran en contra y deploraran dichas acciones aunque no han dado resultado ya que los agentes al parecer se manejan sin control, ni subordinación como chivos sin ley.
Pero más que lamentaciones debemos señalar que estos actuaciones policiales, que han sido difundida por los medios de comunicación ponen en evidencia el deterioro de la disciplina, preparación y el trabajo que la uniformada está haciendo, lo que nos da una muestra por que la delincuencia avanza indetenible en el país, ya que en vez de enfrentar la delincuencia matan a las personas que deberían proteger.
Estos hechos no deben quedar arropado por el manto de la impunidad y el olvido ya que si no se castiga de forma ejemplarizadora estos malos policías, otros seguirán su mal ejemplo por lo que los jueces, fiscales y las autoridades que tenga que ver en estos asunto, tiene que hacer su mayor esfuerzo para tranquilidad de la familia dominicana y estos no vuelva a ocurrir.
Y al capaz mayor general Rafael Guillermo Guzmán Fermín, jefe de todos los policías, del país, que depure bien quienes se encuentran usando indignamente ese uniformes y las armas que el pueblo paga con sus impuesto que son para protegerlos, no para maltratarlos, ni asesinar ciudadanos indefensos y productivos de esta patria.
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