Por Ricardo Rojas Vicioso
Recientemente concluyó sin éxito un
dialogo entre el gobierno de la República Bolivariana de Venezuela y su característica
Oposición, sin ningún acuerdo.
A pesar de las buenas intensiones
del gobierno del presidente Lic. Danilo Medina de ofrecerse y ofrecer la
República Dominicana como mediadora, lamentablemente no se llegó al acuerdo tan
esperado. tanto por el gobierno de Venezuela como de la República Dominicana
como anfitrión.
Quizás, muchos se preguntarán, ¿qué
pasó, y por qué? no se llegó al esperado acuerdo, entre las partes antes
mencionadas.
Para contestar les voy hacer como
siempre pequeños análisis, lo primero es que la oposición. ni ahora ni antes ha
querido acordar nada. La posición de la oposición siempre lo he dicho es que
esperan que Estados Unidos intervengan invada como hizo en Irak, Afganistán, o
Panamá, y luego de la invasión se marchen, y le entreguen en gobierno en una
bandeja de Plata.
No les interesa por tanto ningún acuerdo, ya que saben que no
podrán llegar de otra manera al poder que no sea de forma forzosa, y por la
fuerza de Washington, que ya está cansado de ese gobierno que tanto han
cuestionado y luchado para derrocar desde los tiempo del comandante y
presidente Hugo Chávez Frías, que tanto dolor de cabeza le ha dado.
Además de Estados Unidos, y la
Oposición en la región gracias a las feroces campañas pensadas y accionadas de Washington,
se ha generado una Maduro fobia, que antes era Chavinofobia, pero al morir y
heredar Maduro también heredo el odio sembrado por Estados Unidos y sus
aliados.
La oposición venezolana y el
gobierno de los Estados Unidos están convencidos que el Chavismo es la mayoría en
Venezuela, por lo que las elecciones en ese país nunca favorecerán a la
oposición, por lo que los acuerdo ni las elecciones a ellos les interesa.
Buscan presionar y presionar para
tratar de que Maduro salte del cargo o lo hagan saltar, como el último intento desesperado
del secretario de Estados Rex Tillerson, cuando alentaba al ejercito a accionar
ese cambio que tanto ellos desean, sin embargo recibió una respuesta
contundente del ministro de defensa que ellos eran letales a Maduro y la
Constitución.
Sencillamente todo lo que se ha
intentado para derrotar a Maduro y el Chavismo en Venezuela no ha dado
resultado, son duros de Matar, y hasta las elecciones las ganan, derrotando la
oposición tumbando los argumentos de Dictador y anti demócratas, ya que las
elecciones son procesos de la democracia.
Pero más allá de Venezuela y los
problemas magnificados por la oposición y sobre todo por la crisis económica que
se le ha impuesto para perjudicar y desacreditar el gobierno de izquierda que
si fuera de derecha como el de Honduras no pasara nada.
Las diferencias entre una
oposición desplazada del Poder por inoperantes por Chávez, y que luego recibió el
apoyo de los venezolanos, es un hecho olvidado para muchos. Recientemente conversé
con venezolanos en la República Dominicana, y a pesar de sentirse muy dolido
por la crisis económica de su país, que les obliga a salir hacia otros países pude
luego de conversar extensamente sacar el sentimiento y pensar de esa derecha
opositora que sirve muy poco.
A pesar de que Estados Unidos
quiere cambiar la izquierda y poner una derecha que esté de acuerdo a sus
intereses políticos y económicos, en especial para compartir las riquezas
petroleras, y minerales preciosos como hacían las trasnacionales antes de Chávez,
como solución para el pueblo no tendrá éxito de antemano.
Sin embargo ya Maduro le puso la tapa al pote, para su desgracias Chávez
se pasó durante el tiempo que estuvo en el gobierno decirles muchas verdades a
los norteamericanos y contradecirlos lo que ellos como potencia mundial,
arrogantes y poderosas no le toleran a nadie.
Hoy no importa lo que pasa en
Honduras, ni la miseria de Haití que provoca la migración de millones de
haitianos afectando otras naciones en especial la República Dominicana cuya
carga de haitiano le tiene al punto de colapsar.
Solo se quiere destruir el
Dictador de Maduro a toda costa, aunque eso signifique someter a la población
que no tiene la culpa a la limitación como seres humanos hasta a los productos
más básicos para su alimentación, solo con el fin de culpar a Maduro y su
gobierno.
Como siempre en las guerras los
inocentes pagan las consecuencias, y sufren mientras los grandes, se dan la
gran vida.
Venezuela y el conflicto que
tiene entre el gobierno y la oposición no se resolverán hasta que los
norteamericanos no les den permiso a la oposición de firmar acuerdo. Esa oposición
está amarrada a los deseos de Washington que tanto como ellos desea salir de
ese gobierno Chavista y Maduro.
Ningún acuerdo que no sea la
salida de Maduro y el cambio de esa izquierda serán suficientes para Estados
Unidos, necesitan urgentemente un triunfo en la región luego de la derrota
sufrida en Siria y sus terroristas.
Nada de lo que pase en otras
naciones como México, Honduras, Haití va a distraer la atención y el interés de
Estados Unidos que se despierta todos los días con la esperanza de que el
Chavismo, colapse en Venezuela.
La oposición no responde al
pueblo de Venezuela, este intento de dialogo dio a demostrar que los jefes de
la oposición están en Washington, y si desde ahí, no se da la orden las fichas
de la oposición no se mueve.
Sin embargo, debemos reconocer y
aplaudir el esfuerzo diplomático de la República Dominicana para trata de que
se llegara a un acuerdo, mientras la ONU y la OEA están sentadas haciendo nada,
como cómplices y partes del problema
El trabajo en contra de la unión latinoamericana
que está haciendo el secretario de la OEA el Almagro es una gran vergüenza,
solo habla para tirar leña al fuego de los conflictos, sin embargo nunca está
para armonizar ni buscar salidas a los mismos. La región llegó y la encontró
con problemas, y ni los que encontró ni lo que ha surgido luego de su entrada a
la OEA lo ha podido solucionar ni como mediador sirve.
Esperemos que la perversidad
regional, baje sus niveles, y que los gobierno abran los ojos y deje de seguir
siendo marionetas serviles, cooperando con la división y la mendicidad de las
naciones, en vez de trabajar en la unificación y fortalecimiento regional para
de una vez lograr una independencia política, económica y digna, y dejar de una
vez y por todas de ser cola de león, en vez de ser cabeza de ratón.
Mientras tanto los estómagos y la
dignidad del pueblo venezolano, seguirán a la espera de la solidaridad y
racionalidad internacional, y ojala que no le apliquen la receta de destrucción
y caos, que le dieron al pueblo de Irak, Siria, Afganistán, Siria y Libia que
la medicina resultó peor que la enfermedad, y quedaron peor de cómo estaban.