Por Ricardo Rojas Vicioso
La vida para mucha gente le cambia de un momento a otro, y por esa razón, es importante medir nuestros pasos, palabras y sobre todo lo que vamos a decir, y más cuando se escribe o pública.
Así mismo es importante saber de qué lado, nos colocamos teniendo en cuenta, no hacerlo de lado de los mediocres o la sin razón. Colocarnos del lado equivocado tiene sus consecuencias.
Eso fue lo que le pasó al escritor Junot Díaz que durante un tiempo su prosa, le hizo ganar fama y dinero, hasta el punto de ganar un premio Pulizter.
Sin embargo, quizás para este dominicano de origen, la fama, y el importante nivel social o intelectual que tenía, no le fue suficiente.
No satisfecho con lo que ya tenía la inteligencia se le ausentó del cerebro, o quizás se apoderó de él un sentimiento de animadversión contra los dominicanos, a pesar de que República Dominicana es su territorio de origen.
Junot se abrazó a las campañas de desinformación y de calumnias contra la República Dominicana, que tiene como fin, chantajear, y obligar al gobierno dominicano a aceptar los nacionales haitianos que la región desprecia, y somete a sus leyes migratoria, expulsando e impidiendo lo que no llenen los requisitos para estar dentro de cada una de las naciones de la región
Sin embargo esos mismo países que aplican sus leyes migratorias, participan en las campañas contra la República Dominicana, para que esta nación que ya no aguanta más haitianos, siga recibiéndolo, pero es con la idea de que esos no lleguen a los demás países de la región.
Este escritor se subió en el tren de los que odian los dominicanos, aparentemente el hecho de vivir en tierras extranjeras, y la fama se le subió a la cabeza, se olvidó que era dominicano, y se propuso hacerse, el gracioso, pensando que eso le daría un poco más de fama, y también promoverse, quizás le ayudaría a la venta demás libros.
Sin embargo, hoy las noticias que se pública, no les son nada favorables, acusaciones de acosos, violaciones, y otros temas, al parecer lo sepultan ética y moralmente, y la República Dominicana, no lo puede defender, porque es una persona, no grata para los dominicanos, porque con sus declaraciones pro haitianas, le hizo mucho daño.
Ahora solo, ni los grupos o naciones a los que él le dio su apoyo están de su lado para defenderlo, o darle un soporte hasta moral, aunque él, ya no tenga eso.
Se ha quedado desmoralizado, solo, y cargará para siempre con el calificativo de “traidor pro haitiano”, que se ha ganado con sus declaraciones y ataques perversos, a sus tierra natal, y nadie se lo podrá quita.
El nombre de Junot Díaz, es ahora sinónimo de vergüenza, traición y fabulador, farsante, y un mal dominicano.
Nos alegramos que su situación, por su comportamiento anti ético, no salpique y manche el país, ya que antes de esa desgracia de acusaciones, ya con sus declaraciones contra los dominicanos, marcó una distancia, y consiguió alejarse física y sentimentalmente de la República Dominicana como él quería
Qué bueno que sea así, porque la República Dominicana es una tierra de valientes, nacionalistas y patriotas, ni traidores, serviles y entreguistas como Junot Díaz, caben
República Dominicana es una de las tierras más bellas que ojos humanos hayan vistos, tierra de patriotas y nacionalistas como: Duarte, Sánchez, Mella y Luperón. Ideales con lo que Junot Díaz, no comparte y estoy seguro que desprecia.
Hoy su servilismo y anti patriotismos lo ha condenado gracias a un comportamiento enfermo, y anti ético que nadie, ni él mismo, puede justificar, y tampoco creo que nadie querrá ser el abogado del diablo defendiendo lo indefendible.
La historia nos han enseñado, que los traidores, y serviles siempre terminan igual, derrotados, desacreditados y desmoralizado, por que el mal siempre regresa a su lugar de origen sin importar lo alto que estés
Pero además mientras más alto mayor será la caída, los errores se pagan
Toda acción tiene su reacción con la misma intensidad, pero en sentido inverso República Dominicana es un pueblo guerrero, lucha por sus ideales, soberanía e independencia y no importa quién sea que se meta con dominicana será enfrentado y derrotado por el sentimiento nacionalista y de amor por la Patria que corre por las venas de los dominicanos de verdad, lo que no es Junot Díaz es un falso dominicano, y que bueno que esté fuera de esta tierra, ya que con su aliento contamina el aire.
Que disfrute su fracaso y lo que ha cosechado con sus acciones de perversidad.
Si necesita una nación que lo apoye toque las puertas de Haití, aunque sé que no lo hará en el entendido que no lo ayudará.
“Junot Díaz persona, no grata en República Dominicana
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