La Odisea del General de la Cruz, lo llevó a la cárcel de Artillería.

De General de Brigada (ret) a reo  desconsiderado.

"Rafael De La Cruz, nietos y esposa actual"

Por Ricardo Rojas Vicioso.

El general retirado Rafael de la Cruz, es un  pacífico hombre, militar, profesor universitario, fino analista de geopolitica, diplomatico y ser humano, que todo el que le conoce y ha tratado sabe.

Hasta donde sé, nunca se había visto envuelto en problemas, y es un hombre Cristiano por lo que me sorprendio al enterarme de que una nacional haitiana, le había sometido, con el argumento de genero, que temía por su vida.

La persona que le acusa y lleva a la justicia al General De la Cruz, no es otra persona que su ex esposa, con la cual comparte con él,  la copropiedad de un apartamento.

Ambos tienen un contrato de propiedad del 50 por ciento del apartamento. Por lo que ambos, tienen derecho a convivir de forma pacífica dentro del inmueble.

Sin embargo, hasta donde sé de lo que se trata es de un intento muy ingenioso para sacarlo de la propiedad y de esa forma ella como mujer haciéndose la víctima y tomando de tontos útiles, la débil Policía Nacional, la Justicia y su tan cuestionado Ministerio Público que nunca pega una. 

La situación se inicia cuando el General llega de Francia a su país, la República Dominicana, y al intentar entrar a su casa, el apartamento que comparte con la nacional haitiana, a pesar de estar divorciados, ya ella de forma premeditada le habia cambiado el llavín, con el fin de que él no pueda ingresar a dicho apartamento que es también su casa.

Dentro de ese apartamento tiene propiedades como sus uniformes, insignias, y documentos así como una gran cantidad de objetos  personales importantes, por lo que toma la decisión de romper el llavín para ingresar a su casa.

Pero ese apartamento le costó más de 10 años pagando de su sueldo de militar, con muchos sacrificios y es el sueño de toda persona que trabaja tener su casa propia.

Desde que logra penetrar se inicia una serie de provocaciones y llamadas al 911 con el fin de sacarlo del apartamento, por la nacional haitiana que fue su esposa, en un afán macabro de expulsarlo de lo que es también propiedad del General De La Cruz.

Omito poner el nombre de la señora haitiana, ya que usa dos nombres, realmente cuando hago mención de nacional haitiana es más que suficiente, las autoridades ya tienen conocimiento de esa situación, en una querella con constitución de abogados interpuesta en la fiscalia de falsificaciones desde septiembre 2016, pero nadie fue en auxilio de justicia de este hombre que dio 37 años de su vida al país y a las Fuerzas Armadas, sin tacha alguna en su polivalente carrera.

Pero en su buena fe, el General subestimó la astucia de esta mujer, la cual a pesar de ser de nacionalidad haitiana, no sé si está legal en el país, pero lo real y efectivo es que pudo poner en sus manos a Policía Nacional, al Ministerio Público y a la justicia en sentido general.

Hasta huele a complicidad, al punto que en un momento se le entrega una cita para conciliación de acuerdo a la comunicación y luego es hecho preso,  sometido,  juzgado y mandado por 30 días a la cárcel de Artillería del Ejército de República Dominicana.

Me asombra que una mujer haitiana tenga en el país, más fuerza que un meritorio General retirado de la Fuerza Aérea de República Dominicana,  quien le dio casi cuatro décadas de su vida en servicio activo, y sin embargo esa mujer no tiene ningún merito, ni reconocimiento que se sepa en el país, y puso a todos a comer de su manos hasta salir casi con la suya.

Debo señalar, que no es la primera vez que ella realiza este tipo de movimientos, la primera querella por amenaza la hizo al General De La  Cruz, en momentos que él se encontraba disfrutando de una luna de miel con su actual esposa en el extranjero o sea fuera del país.

Al volver al país, la misma querella fue desestimada, por lo que ahora al parecer buscó la forma de rehacer la historia  o fabula de nuevo, con un poco de  éxito al utilizar fallas del sistema y también  tontos útiles.

De acuerdo a las informaciones que he recibido esa señora dentro de ese apartamento para poder lograr sus objetivos, provocando  al General Rafael De La Cruz, en ocasiones ha intentado tirar al suelo los uniformes con todo e insignias como una forma de irrespeto, no solo a nuestras Fuerzas Armadas, sino también al país y el significado de nuestros símbolos patrios y repitiendo en múltiples ocasiones " tu ya no eres nadie!".

La verdad que cosas como estas me asustan, las desconsideraciones a ex militares, se están poniendo de moda, como si entre la Policía Nacional, y la Justicia haya un plan de venganza o un anti militarismo.

Me  pregunto, ¿Si hubiera sido un juez, o un General de la Policía Nacional,  esa haitiana hubiese corrido con tanta suerte?. Les dejo esa reflexión, y de paso a los militares que han dejado solo a Rafael de la Cruz,  con su indiferencia.

Mírense en esa espejo hoy fue él, pero mañana puede ser cualquiera de ustedes, si no se respetan los rangos, ni la condición de militar de noble servicios a la Patria, aquí todo puede pasar, la desconsideración a militares activos o en retiro será pronto una moda en los destacamentos y pasillos judiciales.

Reitero que el nombre de la señora haitiana no lo he mencionado por razones obvias, ya que tiene dos nombres, y no tengo la seguridad de cual es el auténtico. Otros de los fallos de las autoridades judiciales y del ministerio público que no saben para quien están trabajando y poniendo la acción pública en contra de un general de nuestras Fuerzas Armadas con datos reales.

 Para que tengan una idea de lo mal que estamos en este país, por eso los haitianos entraron un día aquí y pasaron 22 años gobernando la blandita sociedad y autoridades de la época que ojala no se vuelva a repetir.

Una sola  cosa pide el General DE LA CRUZ R., y no creo que sea mucho pedir:  Es solo  JUSTICIA !!!.